Sin enfados.

No me enfado, simplemente no lo entiendo, no estoy de acuerdo, simplemente miro a otro lado y dejo pasar el tiempo, dejo de ser la razón de tu sonrisa, dejo de ser la razón de cada día, y todo por verte feliz, dejar de ser la dueña de tus pensamientos, por ser solo un recuerdo, un recuerdo de las tardes de otoño, ese otoño donde solo eramos tu y yo, lo único que importaba, donde los abrazos no faltaban, ni ninguna de esas miradas.
Quisiera volver a ese tiempo, solo por volver a ir de tu mano, por las conversaciones, por las miradas, por ti, por verte y no arrepentirme, por sonreír de nuevo y que sea gracias a ti, por todo aquello que un día fue lo más importante para mi.