Y parecía difícil salir de aquella niebla que no dejaba ver el futuro, costo dejar atrás aquellas noches en vela donde lo único que reinaba en mi era dolor y cansancio; me faltaba vida, iba con la cabeza alta pero sin mirar al suelo por el vértigo, y llegaste, y nos encontramos.
De un día para otro todo había sucedido, ya no me pertenecía esa sonrisa, ni el fin de mis acciones, ni siquiera mis pensamientos, todo en mi estaba pensado para que tu encontraras en mi ese punto de complicidad que haría que te quedaras a mi lado, y al parecer sin querer, queriendo me enamore de ti, igual o incluso mas, pero nunca menos que tu de mi; que ambos pensamos que empezaba el juego, pero el único juego que empezó era este nosotros en el mundo.
... o te conviertes en drogodependiente como yo de tus besos.
