No somos nada, pero a la vez somos mas que nunca hemos sido y hablo de que ahora se puede jugar.
Ya no hablamos de sentimientos. Ahora algo, todo, ha cambiado. He abierto los ojos, me han abierto los ojos.
Ahora hablamos de deseo, nos conocemos, sabemos lo que nos gusta a cada uno. Los besos, las caricias. Todo ayuda. Tendré el 'poder' de volverte loco en un momento, comerte la boca y a la vez podre darte dos besos y jugar a que nada ha pasado.
No hay normas. Solo placer y deseo. Empecemos.